top of page

Reseña de estudio: Paisajes hidrosociales en el secamiento de la laguna de Aculeo (Jofré et al.2022)

Por Cristian Valenzuela Calderón.


En el día Mundial del Agua, desde LEU compartimos la reseña del estudio: "Donde se juntaban las aguas: paisajes hidrosociales diferenciados (y comunes) frente al secamiento de Aculeo en un contexto de deterioro socioecológico". Realizado por uno de nuestros colaboradores: Cristian Valenzuela Calderón.


Actualmente, el concepto de lo “hidrosocial” permite a investigadore/as científico/as oponerse al paradigma tradicional del ciclo hidrológico, para metodológicamente tratar al agua como un entramado vital afectado por las relaciones sociales y visceversa. En una era donde los cambios tecnológicos, mercantiles y políticos transforman territorios diversos, era a veces comprendida como Antropoceno o Capitaloceno, lo hidrosocial viene a reconstituir epistemológicamente los procesos del agua, ya no solo como algo parte de un ambiente prístino (con factores que inciden como atmósfera, superficie, subsuperficie, biomasa, etc.) sino que también atravesados por obras hidráulicas, legislaciones, instituciones, prácticas culturales y significados simbólicos (Budds, 2012, p.170; véase también: Damonte, 2015; Granero, 2018). A partir de dicha discusión teórica es que el equipo de investigadores de la Universidad Alberto Hurtado, constituidos por Gaspar Jofré, Bejamin Blanch, Santiago Godoy, y mi persona, Cristian Valenzuela, realizamos un estudio de carácter histórico y ecológico-político de una trayectoria de deterioro hidrosocial: el caso de la laguna de Acúleo en la comuna de Paine, Región Metropolitana de Chile.


El estudio (Jofré et al, 2022), fue parte de un trabajo etnográfico realizado en el año 2020 donde se visitaron las localidades colindantes a la laguna de Aculeo: Pintué, Bocahuao, Rangue y Los Hornos. Al recorrer el territorio junto a sus habitantes de los sectores mencionados, la laguna de Acuelo aparece como un conjunto de paisajes compuestos de significados, memorias y experiencias con las cuales sus pobladores que daban sentido al secamiento de la laguna en 2018, uno de los cuerpos de agua más emblemáticos de la región metropolitana. Investigaciones previas como los estudios de Valdés-Pineda et al. 2020, Barría, 2020, y Eridanus, 2016, han concluido que dada la alta demanda de agua subterránea, el secamiento y/o intervención de afluentes tributarios, la baja de precipitaciones y el sobre otorgamiento de derechos de aprovechamiento de agua (para riego agrícola y parcelas de agrado), son factores que degradaron esta laguna. Sin embargo, dichos datos no contaban con relatos que dieran información sobre los sucesos involucrados en la co-afectación entre humanos y cuerpo hídrico. Parte del trabajo de Jofre, et al., 2022 fue registrar aquellas voces que no han permeado la investigación científica, y que a nivel paisajístico tienen una historia que contar.


De este modo, la investigación de los relatos y memorias que nos confiaron sus habitantes fueron ponen en tela de juicio el actual modelo de aguas chileno, los cambios de uso de suelo y la manera en que demandamos, accedimos y usamos el agua en sociedad. Los 3 periodos o momentos que aparecen en las narrativas orales y sistematizados por Jofré, et al. 2022: 1970 a 1995, 1996 a 2010, y 2011 hasta la fecha, permiten rumbos que tomaron diferentes elementos que configuran lo que llaman "paisajes hidrosociales de Aculeo": (1) flora y fauna, tanto silvestre como domesticada; (2) acceso y propiedad de las aguas (y de las tierras); (3) desvíos y extracciones hídricas por medio de dispositivos tecnológicos; (4) actividades productivas en relación al agua; y (5) los estados de esta, en un sentido de percepciones de cantidades y cualidades.


Laguna de Aculeo seca, septiembre 2020 (Registro por Valenzuela Calderón).



Las trayectorias hacia el secamiento de la laguna.


En el primer periodo, los investigadores concluyen que uno de los principales cambios fue el pasar de un Aculeo rural a un Aculeo rurrurbano. Ante de los años 70's Aculeo era una gran hacienda perteneciente a la familia Letelier, quienes tuvieron que cederla a sus inquilinos durante el proceso de reforma agraria (1967-1973). Durante la dictadura cívico-militar en Chile, parte de los terrenos fueron devueltos a los exlatifundistas y el resto parcelada en predios individuales para el campesinado, en la llamada contra reforma agraria. La agro industria de exportación llegó al territorio motivando la ventra de terrias campesinas a inmobiliarias y complejos agroindustriales, lo cual provoco un desplazamiento del campesinado haca los poblados rururbanos de Los Hornos, Rangue, Bocahuao y Pintué, junto con una reconversión agrícola. Luego, muchas tierras se vieron convertidas a condominios compuestos por parcelas de agrado. Sin embargo, los y las habitantes de Aculeo dan cuenta de la abundante biodiversidad que había durante aquellos años, una variada y abundante presencia de fauna silvestre (coipos, pejerreyes, aves, zorros, conejos y pumas), junto con el ganado presente desde los tiempos de la hacienda. Los cerros poseían abundante bosque nativo y alta presencia de frutales en los hogares (nogales, nisperos y parrones), las zarzamoras marcaban los deslindes y se cultivaba trigo, porotos, cañamo, entre otros. Junto con los resabios de la producción vitivinícola de la hacienda.


De este modo fueron aparecieron nuevos rubros asociados a las nuevas viviendas de élite que iban proliferando en la zona, tales como la construcción, la jardinería, la figura del cuidador y el guardia de seguridad, todas ellas destinadas a un mercado laboral masculino. Por su parte, la salarización femenina estuvo fuertemente marcada por las labores domésticas de asesoras del hogar. También se consolida el rubro del turismo, en donde se abre un mercado laboral asociado a restaurantes y almacenes. Lo mismo sucedió ante la aparición de los cultivos agroindustriales. Aquello fue aumentando progresivamente en los 80’ y 90’, comenzando a configurarse Aculeo como una zona turística, caracterizada por su belleza escénica y por los deportes náuticos que desarrollaban los nuevos habitantes y turistas de fin de semana. Las/os aculeguanos dan cuenta de que entre los años 1990 y 2000 hubo un boom en la construcción de condominios y parcelas de agrado, comenzando a poblarse casi la totalidad de la ribera de la laguna y también los cerros, cambiando profundamente el paisaje.


En un segundo periodo, A finales de los 90’s e inició el siglo XXI, se distinguen dos tipos de actores en el territorio de Aculeo. Por un lado, están los Aculeguanos, que son personas provenientes de familias ligadas al pasado hacendal de la localidad. Por otro, están los nuevos actores que han cobrado relevancia en el territorio a partir de tres ejes: (a) La agroindustria, empresas ligadas a la producción de frutales mayores para agroexportación (b) los nuevos parceleros, con construcciones de viviendas constituidas generalmente a través de la figura del condominio, los que además suelen encontrarse alrededor de la conocidos como ribereños; y finalmente (c) los turistas, generalmente provenientes de la ciudad de Santiago, y que hacían uso de la laguna a través de los campings dispuestos para ello en la zona. Cada uno de estos actores (Aculeguanos, agroindustria, ribereños y turistas) guarda una relación diferente con el agua y el ecosistema, por lo que cada uno de ellos configurará un paisaje hidrosocial diferente.


Con esto se aprecia en los relatos un nivel más bajo de la laguna, un menor caudal en los esteros, y cambios en el color del agua desde un tono azulado a uno rojizo y la contaminación asociada a deportes náuticos. Paralelamente, se registra en los relatos transformaciones en la flora y la fauna. Respecto a la primera, estas se expresan en la incorporación de extensiones amplias de frutales mayores dispuestas en forma de monocultivo para producción de exportación, tala de árboles nativos y nivelaciones de terreno para construcción de nuevas viviendas de élite. Mientras que las modificaciones de la segunda son dadas principalmente por la introducción de peces exógenos a la laguna para motivos aparentemente deportivos y emergencia de nuevas especies que disputan el nicho ecológico de la fauna nativa. A partir de la creación de los condominios, se produce un cierre del borde de la laguna, lo que genera una negación del acceso a la misma a través de un ejercicio de privatización de tierras que antecede a la privatización del agua.


Es en este periodo también, se indican los primeros desvíos de aguas superficiales a través de canalizaciones legales e ilegales, lo que constituirá una de las principales causas de secamiento de la cuenca (Valdés-Pineda, et al., 2020). Nuevamente, los autores de dichos desvíos varían en cada paisaje. Para los y las aculeguanas se trata de desvíos relacionados a los condominios y agroindustria, y quienes residen en condominios aseguran que se trata de prácticas asociadas sólo a la agroindustria. Más allá de los antecedentes con los que se elaboran dichas explicaciones, lo cierto es que los desvíos de los cauces hídricos constituyen un elemento relevante en los paisajes hidrosociales desde esta época en adelante. Además de los desvíos de aguas superficiales, también emergen los primeros relatos de baja de las aguas subterráneas, donde nuevamente el paisaje se diferencia a partir del tipo de infraestructura de captación de agua del que se dispone. Así, mientras la noria había sido por excelencia el dispositivo tecnológico adecuado para la captación de aguas subterráneas, empiezan a aparecer los primeros pozos profundos de uso domiciliario.


El secamiento de la laguna de Aculeo


Desde que ocurre el secamiento de la laguna en 2018, se comienza a describir un paisaje marcado por una sensación climática en aire y ambiente más seco y árido, donde algunos ecosistemas que dependían de la laguna para alimentarse mueren y desaparecen. En Aculeo, los animales de ganadería comenzaron a morir por la falta de agua y forraje producida por la sequía y falta de acceso a los cerros, siendo llevados al lecho de la laguna, lugar en que se produjo una muerte masiva de estos. A los campesinos se les prohibió pastar en el Cordón Cantillana por la compactación del suelo, mientras que los latifundistas lo tenían a su disposición. Los cerros y diversas zonas silvestres se reseñan con tristeza por parte de los habitantes más antiguos, donde hay mención a hierbas y plantas que han desaparecido, deforestación marcada por cortes de árboles (uno de 200 años aproximadamente de alto valor emocional) en virtud de la llegada de nuevos habitantes, y manchones rojos en los cerros, correspondientes a árboles nativos secos (como boldos).La falta de la laguna y los desvíos mencionados complican el hábitat de garzas, golondrinas y otras especies que habitaban de manera permanente y estacionaria la laguna de Aculeo. Donde las garzas llegan a pozas de los conjuntos residenciales en busca de alimento ante la falta de agua.


En el momento del secamiento de la laguna se vuelve evidente quienes tienen acceso al agua y quienes no. Durante meses la APR de Rangue-Los Hornos se quedó sin agua. Una habitante del sector comenta que en ese momento se da cuenta de que el agua era privada, y emerge una tensión entre quienes tienen más y menos derechos de agua. Además, se cuestiona el otorgamiento de estos y se plantean dudas sobre el funcionamiento del sistema. Un Apicultor de Bocahuao, menciona el problema de las cuotas de agua en la laguna, la existencia de extracciones hídricas sobre-dimensionadas en relación al agua que entra por las precipitaciones. Los guetos donde las casas están amontonadas sin regularización, nos les permite acceder a la APR, teniendo que sacar agua de pozos profundos gestionados por ellos mismos. Mientras que en los condominios de elite aun hay agua para regar césped y jardines. Clara oposición de los sectores que se abastecen por camiones aljibes suministrados por la municipalidad, bomberos y particulares.


La infraestructura hídrica es descrita como un elemento disruptivo del paisaje. Al encontrarse Aculeo sin agua, aparecen desagües de casas ribereñas que iban directo a la laguna. La construcción de pozos comienza a ser una competencia por el agua subterránea. La cual se basa en quienes tienen la capacidad monetaria, de infraestructura y tecnológica para costear acumulación por tranques o bombeo de aguas profundas. Los monocultivos de cerezas en Los Hornos son un actor cuestionado por los nuevos y antiguos aculeguanos al poseer pozos estimados en 100 metros o más. Agregan también la capacidad de hacer desvíos por parte de los condominios y la agricultura extensiva, como los mencionados desvíos del paso Godoy y arriba del sector Los Arenales en el estero Pintué, así como las canalizaciones mediante tubos en las partes altas de las montañas del Estero Las Cabras. Los cultivos locales y tradicionales de pequeños agricultores van a la baja, cuestión que se contradice con los cultivos agroindustriales que se mantienen verdes y vigentes, ya que utilizan tecnologías de altos costos para extraer agua.



Casa abandonada en condominio de la rivera de Acuelo, Septiembre 2020 (Registro por Valenzuela Calderón).


Paisajes hidrosociales deteriorados y desiguales: una agenda eco-política.


Con esto Jofré et al., 2022, presentan las inequidades en los paisajes de Aculeo expresadas desde antes de la crisis hidrosocial y que se agudizan a partir del secamiento de la laguna, junto a la baja generalizada de los niveles del agua. El hecho de que el acceso se encuentre mediado por la capacidad económica de los actores para acceder a tecnologías y/o a la propiedad, y que permanezcan inequidades en relación con los tiempos de la hacienda, dan cuenta de la importancia de incorporar elementos culturales, políticos e históricos a la discusión. Esto también se observa en términos normativos, producto del sobre otorgamiento de derechos de agua, en el contexto de una propiedad privada del agua que genera un usufructo por parte de sus poseedores y la negación para quienes históricamente no han necesitado de ellos para acceder.


El conocimiento técnico-científico se nutre de las narrativas y los significados socio-culturales en casos de deterioro y desigualdad ecológica. El articulo finaliza con una interpelación a las creencias de objetivismo, ya que - tal como sugieren Latour y Woolgar (1979) - toda investigación contiene decisiones metodológicas y establecimientos de categorías subjetivas sobre las cuales se erigen los trabajos. Especialmente cuando gobiernan nociones del agua como bien económico, siendo reducida a recurso hídrico y evaluada en torno a la oferta y la demanda, invisibilizando la existencia de más elementos en torno a ella; y también cuando se comprende en un sentido mercantil, separándola de las relaciones socioecológicas en que las que se encuentra inserta, para entenderlas como entes separados y reducidos a sus aptitudes netamente físicas. Es un proceso de deterioro socio-ecológico y no una disminución física del caudal aislada de las intervenciones espaciales del paisaje.


Invitamos a leer el articulo completo "Donde se juntaban las aguas: paisajes hidrosociales diferenciados (y comunes) frente al secamiento de Aculeo en un contexto de deterioro socioecológico"de Jofré et al, 2022 acá: https://doi.org/10.53689/pys.v36i1.360



103 visualizaciones0 comentarios
bottom of page